Johan Borg, en un momento de esta película dice La hora del lobo es el momento entre la noche y la aurora cuando la mayoría de la gente muere, cuando el sueño es más profundo, cuando las pesadillas son más reales, cuando los insomnes se ven acosados por sus mayores temores, cuando los fantasmas y los demonios son más poderosos. Este momento trágico es el que da título a esta película, La hora del lobo, que se estrenó a comienzos de 1968, y en la que participaron como actores principales, Max von Sydow, en el papel de Johan, Liv Ullman, en el de Alma, e Ingrid Thulin en el papel de Verónica.
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Ingmar Bergman, dirigió esta película, calificada por algunos, quizás erroneamente, como de terror, pero que es más bien una recreación onírica de tintes inquietantes y angustiosos a los que ayuda su excelente música, el haber sido rodada en blanco y negro y el uso acertado de planos en sombras dando a la luz su matiz preciso para señalar el misterios que se esconde tras cada escena.
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Johan, que es un pintor que está pasando un crisis artística y, quizás existencial se traslada junto con su esposa Alma a una casa situada en una apartada isla, la bergmaniana isla de Farö, en donde serán invitados al castillo del barón Von Merkens, donde aparecen los recuerdos los sueños, los remordimientos y la muerte.
Esta es una obra maestra del cina, en la que el genial sueco reflexiona sobre las relaciones de pareja y la infedelidad, sobre los remordimientos, y sobre los sentimientos autodestructivos que pueden surgir en el artista fracasado.
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