Campeones de Javier Fesser

Reconozco que no me gusta Javier Fesser a pesar de que su primer largometraje, El milagro de P. Tinto, me parece una obra de arte del humor absurdo y de que esta que hoy se presenta me ha parecido muy buena. El motivo es que su película Camino era mala, mentirosa y dañina, claramente orientada ideológicamente, cosa que nunca he soportado, cuando el cine se hace mercenario. Dicho esto, esta de hoy, que ha sido nominada a once premios Goya, me parece algo sensacional, con un guión original y unos actores de primera.

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Campeones nos sitúa en la vida de Marco, un entrenador profesional de baloncesto, que se encuentra en medio de una crisis personal ya que todo en su vida empieza a fallar, trabajo, familia, etc. Acaba entrenando a un equipo compuesto por personas con discapacidad intelectual. Lo que comienza como un desastre y un problema insalvable, se acaba convirtiendo en una lección de vida, en un testimonio de grandeza de miras.
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La película, a la que me acerqué con reservas y cierta prevención, resultó ser, y es justo reconocerlo, una película divertidísima, tierna, humana, emocionante, algo previsible y llevada con un ritmo adecuado para disfrutar un buen rato con la familia, por ejemplo.