The Straight Story es el título de una película dirigida por David Lynch y que hace un juego de palabras con el apellido de su protagonista, Alvin Straight. En español se pierde este doble significado con el título "Una historia verdadera". Y no miente ya que cuenta la historia real de Alvin que un pequeño tractor corta-césped recorrió durante seis semanas una distancia superior a los 400 kilómetros (a 8 km/h.) para ver a su hermano Henry con quien se había enfadado, a quien hacía más de 10 años que no veía y que acababa de sufrir un infarto..
Esto sucedió en el verano de 1994. Alvin falleció dos años más tarde y David Lynch, conmovido por la historia decidió llevarla al cine en 1999. El veterano actor que juega el papel de Alvin fue nominado para un Oscar y la película para la Palma de Oro de Cannes, junto con otros premios menos conocidos pero igualmente merecidos.
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La puesta en escena es sencilla y conmovedora. Los amplios paisajes agrícolas del medio-oeste americano son el escenario bien fotografiado en que se desenvuelve la acción carente de sobresaltos y que, quizás por ello, entra directamente en la retina y en el corazón del espectador.
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Esta cinta es una maravillosa película que supone un canto a la vida, a la familia, al perdón y a la vejez, achacosa, tozuda y encantadora de Alvin y de otros cientos de miles que, como él, están dispuestos a tomar "su tractor" para rejuvenecer y terminar una tarea inconclusa.
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