Andaba yo inquieto buscando un libro que ya tendrá su hueco en este baluarte cuando dí con una editorial pequeña, de autores poco comerciales, lo cual era toda una promesa. Es sevillana y se llama Los papeles del sitio y editan cosas muy interesantes. Tanto es así que encargué varios títulos que por sus autores o temática me resultaron muy apetecibles además del volumen que buscaba.
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Entre los libros, uno de Jerónimo Molina Cano, joven profesor de la Universidad de Murcia y director de la revista Empresas políticas, glosaba la peripecia intelectual de uno de los escritores malditos de España, Ernesto Giménez Caballero, Gecé. Su original título es En la cabellera de un cometa llamado Ernesto Giménez Caballero y en este pequeño volumen incluye también un ensayo titulado Giménez Caballero y Murcia.
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El profesor Molina hace un análisis de la trayectoria literaria, política y, digamos, vital, de Gecé. Rescata su memoria de una condena al ostracismo de que fuera sin duda el principal de los impulsores de las vanguardias culturales de España a través, sobre todo, de La Gaceta Literaria". Inconformista permanente, fue huérfano de una victoria en la Guerra Civil en la que contribuyó con la pluma, con su esencial Genio de España (1932), y con el mosquetón como Alférez en la IV Brigada de Navarra. Tras nuestra triste contienda, acabó siendo una especie de exiliado interior y fue apartado de la escena cultural española por el régimen mediante un puesto diplomático en el lejano Paraguay. Pero Gecé siguió siendo fiel a sí mismo y continuó siendo maestro de quien quisiera leerle. Escribió entonces su serie de elogios (o amores) por las tierras de la hispanidad, Argentina, Bolivia, Paraguay, Portugal, Murcia, Cataluña...
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Tras su regreso a España, y sobre todo a partir de 1975 el "sistema de los mandamases académicos", que diriá Gecé, le condenó al ostracismo por pura revancha política, "deporte cultural" español por excelencia. Este libro del Profesor Molina ayuda a rescatar su memoria, reivindicar la figura enorme de Gecé, del amigo de Antonio Machado, Alberti o Miguel Hernández, del inventor de los cine-clubes y recuperar lo mucho que este gigante hizo por la literatura española.
5 comentarios:
Casualmente lo acabo de leer, y me ha encantado. La mejor aportación de Molina Caro creo que es el desmontaje de ciertas etiquetas de la que es objetó Gecé. Especialmente por parte de Mainer, y en menor medida por Trapiello y Umbral.
Hay una recomendable entrevista al autor en la web de la Cope.
Salu2
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No creo en las casualidades...
Efectivamente a Mainer le da un repaso importante y le quita el rigor que este crítico pudiera tener. A "Las armas y las letras" de Trapielo, en cambio, creo que se le suele considerar como ecuánime, pero confieso que no he leido nada de Trapiello.
Gracias por tu comentario y recuerda que las casualidades... no existen.
Un saludo a nuestro estilo.
Abu
Mainer es sectario, pero está documentado. Si hay un libro desaconsejable es "Las armas y las letras" de un vividor de las últimas.
Gracias por la advertencia. Me informaré al respecto.
Abu
De Trapiello, Las Armas y las Letras me parece muy recomendable y al menos tiende a la objetrividad que tratándose del tema que se trata no es poco. Vivir de las letras no me parece repochable, me parece un milagro.
En lo de Mainer coincido: utiliza la documentación muy tendenciosamente. Pero lo peor de todo es que ha creado importante escuela.
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