El director alsaciano afincado en los EEUU, William Wyler, ganó tres Oscar como mejor director en su larga carrera cinematográfica. En esta película que dirigió en 1953 fue también nominado al oscar a la mejor película y al mejor director, sin obtener ninguno de ellos, pero, a cambio, obtuvo tes premios, incluido el de mejor actriz principal para Audrey Hepburn a quien se le concedió también el BAFTA de ese año, lo que le daría uno de sus primeros éxitos y el que la lanzó definitivamente a la fama.
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Vacaciones en Roma cuenta lo que le sucede a la princesa Anna, interpretada por Audrey Hepburn, a su llegada a Roma de visita oficial. Cansada de sus obligaciones y de la soledad de su mundo cortesano, decide escaparse durante la noche y vivir la vida de una persona normal y corriente. Conoce a un periodista llamado Joe Bradley, interpretado por Gregory Peck, quien se ofrece a hacer de guía para ella en Roma, en un principio, por el interés de una exclusiva periodística, que incluye unas fotos hechas a escondidas. Juntos recorren Roma durante un día completo en el que se divierten, pasean en Vespa, asisten a un fiesta nocturna y acaban enamorándose. La princesa toma una dura decisión y se despide de Bradley diciendole que jamás olvidará esos momentos, olvidando Bradley el reportaje en que tanto había soñado, como muestra de respeto a Anna.
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Vacaciones en roma es una fábula moderna de princesas y galanes, de elegancia y amoríos sanos y nada interesados, que destila un olor a flores, un canto a las cosas sencillas y cotidianas, a las relaciones de pareja tiernas y simples sin las complicaciones con que ahora se nos pesentan. es además un canto a la Ciudad Eterna, un paseo luminoso por una Roma amable polvorienta y confiada que acababa de salir de una guerra pero miraba alegre y confiada a su futuro, apoyada en su monumental pasado.
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