Fresas salvajes de Ingmar Bergman

El genial director de cine sueco Ingmar Bergman, llevó a las pantallas esta película en 1957 considerada por algunos críticos como una obra maestra. Fresas Salvajes que recibió varios premios, como el oso de oro en el Festival de Berlín, un Globo de oro y fue nominada para el Oscar al mejor guión original, que no ganó.
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El Doctor Isak Borg, de cerca de 80 años va a recibir un doctorado de honor pero durante la víspera sueña con su propio entierro lo que le impulsa a hacer el viaje hasta Lund, donde será la ceremonia, en coche acompañado por su nuera y a la que durante el viaje se van incorporando otros personajes, que propician discusiones varias sobre temas profundos, como la existencia de Dios o sobre el perdón y la necesidad de reconciliarse con el otro.
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Las constantes evocaciones, reales u oníricas, de la infancia del Doctor Borg son una parte importante de la película, lo que perite a Bergman bucear en los recuerdos y buscar las claves de los problemas actuales que sufre este personaje.
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Rodada en blanco y negro pero de una gran belleza plástica y con dos actores principales absolutamente magníficos, Fresas salvajes es una reflexión sobre la vejez y los anhelos humanos, sobre la familia, el valor de la experiencia en la vida, la necesidad del perdón. Esta es una obra de arte que le dejará buen sabor de boca.