Breve historia comentada de la Real Gran Peña (1869-2011) de Leandro Carrasco Sierra

Mi vínculo con la Real Gran Peña es muy reciente, insignificante en términos históricos. Fui admitido como peñista hace menos de dos años y quizás no le he sacado hasta ahora todo el rendimiento a tan selecto Club y salvo algunas comidas y cenas en su, por tantas razones, magnífico comedor o discretas conversaciones en la intimidad del bar de socios, pocas más veces he entrado en la venerable sede, casi centenaria del número 2 de la madrileña Gran Vía. Son quizás los viajes fuera de Madrid los que me ofrecen una mejor oportunidad de disfrutar de la Peña gracias a las correspondencias con clubes de similar categoría dentro y fuera de España.
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En sus salones se respira un ambiente de plena libertad en la que uno se siente como en su casa, donde sabe que jamás será importunado y que nada a su alrededor va a resultar molesto ni improcedente, todo ello en una atmósfera de buen gusto y educación y formas exquisitas.
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Esta Navidad, junto con la felicitación institucional de la Peña, se me envió un librito en edición no venal, magníficamente editado que lleva por título Breve historia comentada de la Real Gran Peña (1869-2011) cuyo autor es un veterano y documentado empleado de la sociedad: Leandro Carrasco Sierra, a quien agradezco sinceramente el esfuerzo y aplaudo su obra.
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El libro comenta de forma agradable y sucinta las vicisitudes, agradables o trágicas de la Peña en su casi siglo y medio de existencia. Especial mención se hace de la colección de cuadros que incluye obras de los mejores artistas de España de finales del siglo XIX y una monumental biblioteca de varias decenas de miles de volúmenes, algunos de ellos únicos.