En un momento de tribulación pedí al Señor que me ayudara a tener la palabra precisa. Cuando llegó el momento, en un limpio amanecer, decenas de pájaros comenzaron a cantar iluminando mi discernimiento. No creo en las casualidades y menos en vísperas del día de la Santísima Trinidad. De ese momento mágico nace este poema que comparto con Vds.
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Uno y trino
Uno y trino
Hace tiempo que te escucho
al tiempo que sale el sol
y siempre me he preguntado
¿por qué gusta tu canción?
En las sombras de un jardín
sobre un olmo o bajo el boj
cantando vive alegrando
nuestra vida, un ruiseñor.
Mensajero de lo Alto
canta siempre con el son
que los ángeles le dejaron
para alegrar la mansión,
la cueva, el campo claro
o un oscuro callejón
donde viven esperanzas
ardiendo en un corazón
que tu trino ha despertado
como heraldo del Señor.
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